MIS TAREAS

viernes, 28 de agosto de 2020

METAS Y PROYECTO PERSONAL

               PROYECTO DE VIDA”  

El proyecto de vida es una herramienta que pretende apoyar el crecimiento personal, identificando las metas que deseamos conseguir y reconocer las capacidades que poseemos; este plan evita la dispersión y el desperdicio de tiempo y de nuestros recursos. Es un proyecto porque se expresan todos aquellas ilusiones, sueños, metas y objetivos que se desean alcanzar, considerando los diferentes aspectos de nuestra vida; involucra la toma de decisiones con madurez; para lograrlo se necesita constancia, perseverancia para cumplirlo.

A través de establecer metas es posible identificar y obtener los recursos o medios para llevar a cabo su cumplimiento. Cuando se tiene claro lo que se quiere y cómo obtenerlo, será sencillo retomar el camino cuando se presenten impedimentos, obstáculos o dificultades, o cuando debido a las actividades y responsabilidades cotidianas nos hayamos desenfocado de nuestras metas y volvamos a trabajar por aquello que queremos lograr. Esto también posibilita que alcancemos la realización y satisfacción personal.


                   SUS CARACTERÍSTICAS:

Algunas de ellas se enumeran a continuación: 

Personal: 

La elaboración del proyecto de vida obedecerá a tu situación específica, a tus gustos, necesidades e intereses. Nadie debe realizarlo por ti, tal vez puedas solicitar consejos o sugerencia a las personas más cercanas sin que ello sea determinante porque es un proyecto tuyo. Las metas son personales y sólo tú puedes decidir a dónde quieres llegar. 

Realista, objetivo y coherente:

La planeación y el establecimiento de las metas deberán corresponder a tu realidad, a tus posibilidades, capacidades, aptitudes y habilidades. Esto implica que debes conocerte bien y reconocer el medio en el que te desenvuelves. Deberás considerar aquello que si depende de ti, no de lo que otros puedan hacer por ti ni del azar o de una circunstancia externa. Por ejemplo, puedes planear cuánto ahorrarás porque ello si está en tus manos, pero no puedes tomar en cuenta que te sacarás la lotería o el “me late” porque eso no depende de ti.

Flexible:

Nuestra vida va transcurriendo en diversas y situaciones sean personales, familiares, escolares, laborales o sociales, que podrían cambiar en algún momento; una enfermedad, un accidente, un nuevo trabajo, un bebé, la edad que va avanzando, la muerte de algún ser querido, entre otras, por las que será necesario replantearnos el proyecto de vida, que habíamos definido tanto en cuestión de las metas como en los medios y recursos con que contemos para alcanzarlas. 



    Por qué es importante un proyecto de vida

Un proyecto de vida es esencial, en primer lugar, porque está dirigido a una de las más elementales necesidades del ser humano: la autorrealización. Este proceso prioriza lo importante ante lo accesorio, identificando las decisiones que dotan de sentido al modo en que se vive. Esta distinción se lleva a cabo en el contexto de un plan de acción claro, que diluye la ambigüedad a la que nos expone la convulsión general del entorno.

Los proyectos de vida también contribuyen a la construcción de la identidad, puesto que una persona es en gran parte aquello a lo que dedica su tiempo (sus actos). A través de este análisis podemos determinar qué acciones son congruentes con un sentido más profundo de quiénes somos, en lugar de implicarnos erráticamente en una miríada de actividades que no guardan conexión alguna con nuestros valores o necesidades.

     Cuáles son sus aspectos fundamentales

1. ¿Cuál es mi realidad en estos momentos?

Aunque las coordenadas del proyecto de vida puedan sugerir que se ubica en algún punto del futuro, lo cierto es que deben sostenerse en la realidad del presente tal y como es. Esta realidad es el cimiento a partir del cual deben considerarse todas sus dimensiones básicas. De lo contrario, podemos perdernos ante la incompatibilidad entre aquello que deseamos conseguir y el marco objetivo en el que nos encontramos.

2. ¿Cuáles son mis necesidades?

La identificación de las propias necesidades es un proceso difícil, porque con frecuencia hemos llegado a confundirlas con lo que en realidad son deseos. Aunque pudiera parecer que la diferencia entre unas y otras es solo una cuestión gramatical, el incumplimiento de cada una de ellas supone consecuencias diferentes: si no se satisface una necesidad caemos en la desesperación, mientras que si se impide un deseo la emoción resultará más fácilmente gestionable (fastidio, por ejemplo).

3. ¿Cuáles son mis objetivos?

Un objetivo es una meta que consideramos importante en lo personal, según la situación actual y las necesidades percibidas. Es común que los objetivos no se definan de una forma precisa, por lo que se proyectan resultados deseables pero se desconocen las acciones que facilitarán su logro (o las herramientas de las que habrá de proveerse). Identificar con claridad qué queremos conseguir es el primer paso para actuar congruentemente con ello.

4. ¿Cuáles son mis valores?

Los valores constituyen el posicionamiento que la persona asume sobre aspectos clave para su vida, y cuyo peso es muy superior al que puede atribuirse a la opinión. Los valores se imbrican en múltiples áreas de lo cotidiano, y son uno de los motivos más elementales por los que las personas asumen un compromiso sólido y duradero. Así, un análisis de nuestras convicciones más profundas permitirá esbozar un plan de vida que sea coherente con ellas, lo que reportará un sentido de congruencia.

5. ¿Cómo puedo proceder?

En el momento en el que se clarifican todos los pasos precedentes, la persona está en mejor disposición de elaborar un plan de vida adecuado, el cual debe reunir las siguientes características fundamentales: ser respetuoso con el estado actual de las cosas, cubrir las verdaderas necesidades, estar compuesto de logros asequibles y coincidir con nuestros valores. Con todo ello, estaremos dispuestos no solo a diseñarlo, sino también a ponerlo en marcha.




viernes, 21 de agosto de 2020

TIPOS DE PROYECTOS EMPRESARIAL, ETAPAS PARA LA ELABORACIÓN DE UN PROYECTO

     TIPOS DE PROYECTOS EMPRESARIAL

              ¿QUÉ ES UN PROYECTO?

Es básicamente la suma de acciones para desarrollar ideas de negocio. Pero no puede ser cualquier idea; debe ser con dos condiciones básicas: la viabilidad comercial y financiera y la visión a corto, medio y largo plazo.

TIPOS DE PROYECTOS:

a) Según el grado de dificultad que entraña su consecución:

  • Proyectos simples: aquellos cuyas tareas no tienen demasiada complejidad y que se pueden realizar en un tiempo relativamente corto.
  • Proyectos complejos: son los que demandan mayor planificación o cuyas tareas son numerosas y requieren de una organización distinta a la un proyecto simple. El tren de alta velocidad en La Meca es un buen ejemplo.

 

b) Según la procedencia del capital:

  • Proyectos públicos: se financian en su totalidad con fondos públicos o que provengan de instituciones gubernamentales.
  • Proyectos privados: sus aportes provienen exclusivamente de la iniciativa privada o de empresas con capital particular.
  • Proyectos mixtos: combinan las dos formas de financiación: la pública o de entidades estatales y la privada.

c) Según el grado de experimentación del proyecto y sus objetivos:

  • Proyectos experimentales: son los que exploran áreas o campos en los que hasta el momento nadie ha realizado aportes o cuya consecución supone una apuesta por algo inédito o novedoso.
  • Proyectos normalizados: tienen una serie de normas o parámetros que van marcando las fases de ejecución y monitorización.

 

d) Según el sector:

  • Proyectos de construcción: suponen la puesta en marcha de una obra de tipo civil o arquitectónico. Por ejemplo, cuando se construyen edificios, puentes, vías ferroviarias, presas, carreteras, entre otros.
  • Proyectos de energía: se basan en el aprovechamiento y el uso de la energía o en el hallazgo de nuevas formas de producirla.
  • Proyectos de minería: consisten en la extracción de minerales, productos o materias primas que se hallan en la naturaleza.
  • Proyectos de transformación: se ejecutan en un escenario con el objetivo de generar una transformación de sus condiciones y características.
  • Proyectos de medioambiente: van orientados al fomento de prácticas para el cuidado y la preservación de los recursos naturales y el equilibrio del planeta. Por ejemplo, iniciativas de reciclaje o de conservación de bosques.
  • Proyectos industriales: aquellos que pretendan impulsar la industria en cualquiera de sus sectores a través de la elaboración de un producto o servicio.
  • Proyectos de servicios: a diferencia de los proyectos de productos, en este caso se trata de proporcionar bienes inmateriales a un tercero.
  • Proyectos de banca o finanzas: se orientan a la gestión en el campo de la banca o a las inversiones de capital. Por ejemplo, cuando una empresa compra las acciones en busca de un aumento de sus beneficios.

 

e) Según el ámbito:

  • Proyectos de ingeniería: son aquellos dirigidos al diseño y elaboración de herramientas técnicas y tecnológicas, maquinaria de uso industrial, y otra serie de elementos, en función de la especialidad. 
  • Proyectos económicos: se enfocan en temas monetarios o en actividades que reporten alguna oportunidad de negocio para las empresas.
  • Proyectos fiscales: son aquellos que se relacionan con temas como las leyes, los procedimientos y reglamentos propios de la Hacienda púbica. Son propios del sector público y de entidades con facultades regulatorias.
  • Proyectos legales: apuntan a la redacción y puesta en marcha de leyes en un determinado contexto, país, región o localidad.
  • Proyectos médicos: están orientados al refuerzo de la salud y la sanidad y a la atención de pacientes en un lugar específico. Muchas ONG realizan proyectos de este tipo en países con necesidades de cobertura médica.
  • Proyectos matemáticos: impulsa las ideas para la publicación de teoremas académicos en este campo o que puedan tener una aplicación en la realidad.
  • Proyectos artísticos: buscan el impulso de iniciativas relacionadas con las artes plásticas, la arquitectura, el cine, la literatura, la escultura, etc.
  • Proyectos literarios: se especializan en la producción, redacción, revisión y publicación de una obra expresada en lengua escrita.
  • Proyectos tecnológicos: llevan a cabo iniciativas que tienen como principal objeto la producción de un bien tecnológico que suponga una mejora en áreas o regiones específicas. El acceso a internet en países con escaso desarrollo es un buen ejemplo de este tipo de proyectos.
  • Proyectos informáticos: se relacionan con la instalación y puesta en marcha de sistemas informáticos con determinados fines. Las empresas requieren cada cierto tiempo una actualización de dichos sistemas.

 

f) Según su orientación:

  • Proyectos productivos: son proyectos orientados a promover la producción de bienes, servicios o productos con un determinado objetivo.
  • Proyectos educativos: se focalizan en el área de la educación, cualquiera que sea el nivel de enseñanza. En España, por ejemplo, uno de los proyectos que se desarrollan en este momento es la implementación de escuelas bilingües en varias comunidades autónomas.
  • Proyectos sociales: apuntan a la mejora de la calidad de vida de una región, país o localidad. Las personas son sus principales beneficiarios.
  • Proyectos comunitarios: son similares a los proyectos sociales, con la única diferencia de que las personas beneficiadas tienen un papel activo durante la ejecución de las labores previstas.
  • Proyectos de investigación: todo aquel que disponga de medios a grupos de trabajo focalizados en la indagación y análisis de áreas o campos específicos.

 

g) Según su área de influencia:

  • Proyectos supranacionales: se implementan en grandes regiones, que por lo general superan las fronteras nacionales y continentales. Un claro ejemplo son las iniciativas que surgen al interior de la Unión Europea.
  • Proyectos internacionales: en este caso, son proyectos que comparten dos o más países, como por ejemplo cualquier iniciativa bilateral.
  • Proyectos locales: su alcance se limita a ciertas comunidades, localidades, pueblos o comarcas. La acción es mucho más específica.
  • Proyectos nacionales: se implementan a lo largo y ancho de un territorio o país. Son propios de sistemas de gobierno centralistas en los que se marcan unas directrices desde la administración y el resto de territorios las adoptan.
  • Proyectos regionales: su nivel de incidencia es mayor que la de un proyecto local, pero a la vez menor que la de uno nacional. En España, las diputaciones provinciales promueven iniciativas de este tipo.



  ETAPAS PARA LA ELABORACIÓN DE UNA                               PROYECTO 

 

1. Inicio:

La fase de inicio es crucial en el ciclo de vida del proyecto, ya que es el momento de definir el alcance y proceder a la selección del equipo. Sólo con un ámbito claramente definido y un equipo especializado, se puede garantizar el éxito. Es además, el momento de compartirla visión con los stakeholders y buscar su compromiso y apoyo.


2. Planificación:

Ésta es a menudo la fase más difícil para un director de proyecto, ya que tiene que hacer un importante esfuerzo de abstracción para calcular las necesidades de personal, recursos y equipo que habrán de preverse para lograr la consecución a tiempo y dentro de los parámetros previstos. Asimismo, también es necesario planificar comunicaciones, contratos y actividades de adquisición. Se trata, en definitiva, de crear un conjunto completo de planes de proyecto que establezcan una clara hoja de ruta.


3. Ejecución:

En base a la planificación, habrá que completar las actividades programadas, con sus tareas, y proceder a la entrega de los productos intermedios. Es importante velar por una buena comunicación en esta fase para garantizar un mayor control sobre el progreso y los plazos. Asimismo, es indispensable monitorizar la evolución del consumo de recursos, presupuesto y tiempo, para lo que suele resultar necesario apoyarse en alguna herramienta de gestión de proyectos. En esta etapa se deben gestionar: el riesgo, el cambio, los eventos, los gastos, los recursos, el tiempo y las actualizaciones y modificaciones.


4. Seguimiento y control:

Esta fase comprende los procesos necesarios para realizar el seguimiento, revisión y monitorización del progreso de proyecto. Se concibe como el medio de detectar desviaciones con la máxima premura posible, para poder identificar las áreas en las que puede ser requerido un cambio en la planificación. La etapa de seguimiento y control se encuentra naturalmente asociada a la de ejecución, de la que no puede concebirse de forma separada, aunque por su importancia y valor crítico.


5. Cierre:

Esta fase comprende todos procesos orientados a completar formalmente el proyecto y las obligaciones contractuales inherentes. Una vez terminado este estadio, se establece formalmente que el proyecto ha concluido.








sábado, 15 de agosto de 2020

PROYECTO EMPRESARIAL

                              PROYECTO EMPRESARIAL

El proyecto empresarial es un documento de gran utilidad, que no sólo refleja los objetivos que pretendes lograr, sino que será tu guía a seguir, sobretodo, en la fase inicial y que, posteriormente, te servirá como instrumento de seguimiento y control. Se trata, en definitiva, de un estudio previo de viabilidad del negocio.


En cuanto al contenido del proyecto empresarial, ¿qué aspectos deben quedar reflejados?:

  • Mercado. Antes de lanzarte al desarrollo de tu idea, debes hacer un minucioso análisis del mercado, de una manera objetiva y realista. ¿Es coherente tu idea? ¿Saldrá rentable? ¿Hay mucha competencia?
  • Documentación y trámites administrativos. Los comienzos nunca fueron fáciles, y es mucha la burocracia a la que has de enfrentarte. Estudia bien a qué organismos deberás acudir, cuál será la documentación que te solicitarán, qué impuestos te afectarán, permisos y seguros que debes contratar, etc. Es muy aconsejable que te apoyes en los servicios de un buen asesor: un mínimo detalle que se te pueda pasar y hay probabilidad de que te multen.
  • Financiación. La inversión que requiere un negocio, por pequeño y sencillo que sea, es bastante y es una de las principales trabas que frena a los emprendedores.  ¿Con qué recursos cuentas? ¿Te puedes valer de alguna subvención?


¿Para qué sirve un proyecto empresarial?

Redactar y disponer de un proyecto empresarial sirve, sobretodo, para analizar y estudiar la viabilidad del proyecto que quieres llevar a cabo. Igualmente, servirá como plan de actuación y seguimiento, sobre el cual basarse a la hora de tomar decisiones importantes.

Contenido del proyecto empresarial

¿Qué no debes olvidar a la hora de elaborar y redactar tu proyecto empresarial? ¿Qué deberías tener en cuenta para presentar tu proyecto empresarial? Hay varios elementos básicos que cualquier negocio debe considerar, por pequeño que sea:

  1. Identificación del proyecto: su nombre, ubicación y ámbito de actuación, así como la forma jurídica que adoptará.
  2. Persona promotora del proyecto: ¿quién está al frente del negocio? ¿Quién tendrá responsabilidad sobre el mismo?
  3. Descripción de la idea de negocio, señalando igualmente el sector de actividad.
  4. Estudio del entorno, con sus correspondientes análisis PESTEL y análisis DAFO.
  5. Plan de marketing, teniendo muy bien definidas las 4P del marketing mix: producto, precio, promoción y distribución.
  6. Plan de producción. Recursos y capacidades de las que dispongo, cómo se organizarán o con qué proveedores contará tu negocio.
  7. Plan de recursos humanos. Detrás de cada gran proyecto, hay grandes personas. El capital humano es fundamental para que un negocio sea próspero. Ten claro quién conformará el equipo directivo, qué puestos de trabajo se requerirán, etc.
  8. Plan económico-financiero: cómo se financiará tu proyecto, cuál es la previsión de los resultados económicos en un medio/largo plazo y cómo se rentabilizará el mismo.








sábado, 8 de agosto de 2020

”ORGANIZACIÓN Y PLANIFICACIÓN DE LA EMPRESA”

 ¿QUE ES LA ORGANIZACIÓN DE UNA EMPRESA?

Es un factor muy importante que asegura su buen funcionamiento ya que ayuda a conseguir con más facilidad los objetivos fijados en la empresa, colabora en el mejor uso de los medios de los que se dispone, mejora la comunicación entre los distintos trabajadores de una empresa y que por ello se diseña la organización empresarial implica ordenar, estructurar e integrar las unidades orgánicas y los recursos disponibles de una empresa, además de las responsabilidades de cada uno y las relaciones entre ellos.

¿COMO PODER REALIZAR LA ORGANIZACIÓN EMPRESARIAL?

La organización empresarial da el primer paso dividiendo la organización en diferentes departamentos que agrupan trabajos semejantes, además de establecer las relaciones jerárquicas entre ellos. Esta división puede ser por funciones, por productos, por clientes, por proyectos, por procesos, etc.

Una vez que la empresa está compuesta por diferentes departamentos, es el momento de realizar la organización empresarial para triunfar con el negocio y no dejar nada al azar.

  1. Fija unos objetivos para la empresa: Estos objetivos deben ser reales y alcanzables y debes fijar metas concretas para cada departamento. Una vez fijados házselos saber a los distintos integrantes de la organización.
  2. Controla los recursos que se dispone en la empresa: Estos recursos son tanto financieros como humanos. Es necesario conocer la cantidad de trabajadores de los que dispones y, sobre todo, cuáles son sus capacidades. Esto te ayudará a reducir costos y fijar con más claridad los límites de producción.
  3. Organiza las tareas: Crea un listado con las actividades que realiza la empresa, fija en él cuáles son los trabajos prioritarios, el tiempo que se debe emplear para su ejecución y quién será el responsable de cada una de las actividades.
  4. Debes estar preparado para cualquier adaptación: Esto quiere decir que el mercado está en constante cambio, al igual que la tecnología o, incluso, las condiciones internas de una empresa, por lo que como organización de la organización se debe estar preparado para cualquier cambio.
  5. Es imprescindible que controles los gastos: Parecerá muy obvio, pero es necesario no gastar más de lo que se ingresa, por lo que debes seguir un riguroso control de las cuentas con costes y las ganancias.


¿QUE ES LA PLANIFICACIÓN DE UNA EMPRESA?

Es la hoja de ruta sobre la que se escribe el futuro del negocio, igual que sucede en el ámbito de los proyectos, esta preparación previa a la ejecución, el análisis y estructuración que precede a la toma de acción es vital para minimizar el riesgo y apuntar hacia el éxito.

La actualización de la planificación empresarial

La actualización de la planificación empresarial no debe hacerse esperar. Siempre puede ser un buen momento para revisar el plan y comprobar su ajuste aunque, al menos, esta tarea debe llevarse a cabo en las siguientes ocasiones:

  • Con una periodicidad anual: para revisar la propuesta de valor que se hace a los clientes y clientes potenciales, intentar abrirse a nuevos segmentos de mercado o diversificar.
  • Al final de cada mes: al menos para comprobar que no existen grandes diferencias entre los resultados alcanzados y los planeados, sobre todo en el área financiera. En esta revisión de actualización puede aprovecharse para ajustar deadlines, tareas o actividades, adaptándolas mejor a la realidad.
  • Cada vez que se introduzca un cambio significativo: dentro de la organización o en el mercado también será necesario actualizar la planificación empresarial, para ganar alineación con la situación que se atraviesa y sus circunstancias y mejorar el enfoque de la toma de decisiones y las acciones a emprender.